Un terceto muy peculiar(Primera fase mundialista)

MEJOR EQUIPO
1) Argentina
2) España
3) Alemania

PEOR EQUIPO
1) Togo
2) Serbia y Montenegro
3) Angola

EQUIPO DECEPCIONANTE
1) Serbia y Montenegro
2) República Checa
3) Croacia

EQUIPO REVELACIÓN
1) Australia
2) Ecuador
3) Ghana

JUGADOR DECEPIONANTE
1) Zidane (Francia)
2) Luca Toni (Italia)
3) Ronaldinho (Brasil)

JUGADOR REVELACIÓN
1) Carlos Tenorio (Ecuador)
2) Appiah (Ghana)
3) Agustín Delgado (Ecuador)

PEOR PARTIDO
1) Croacia 0-0 Japón
2) Suiza 0-0 Francia
3) Ucrania 1-0 Túnez

MEJOR PARTIDO
1) Argentina 6-0 Serbia y Montenegro
2) Alemania 4-2 Costa Rica
3) Australia 2-2 Croacia

MEJOR GOL
1) el 2do de Argentina hecho por Cambiasso a Serbia y Montenegro
2) el 4to de España hecho por el Niño Torres a Ucrania
3) el 1ro de Alemania hecho por Lahm a Costa Rica

PEOR GOL
1) el gol de EEUU en contra hecho por Zaccardo a Italia
2) el 1ro de España hecho por Xabi Alonso a Ucrania
3) el 2do de España hecho por David Villa a Ucrania

JUGADOR ASESINO
1) Daniele De Rossi (Italia)
2) Avery John (T&T)
3) Ghana

JUGADOR CON MÁS ONDA
1) Razak Pimpong (Ghana)
2) Peter Crouch (Inglaterra)
3) Brent Sancho (T&T)

Deseos (y utopías) Mundiales

Que Argentina gane el mundial

Que la final sea contra Brasil

Que en caso que Argentina no la gane, que tampoco la ganen los brasileros y los ingleses

Que España repita su tradicionales papelones mundialistas

Que Argentina pase el grupo con Serbia y ¿Montenegro?

Que se enfrenten Serbia y Croacia

Que Alemania pierda el partido inaugural contra Costa Rica

Que Trinidad&Tobago le gane a Inglaterra

Que Paraguay le gane a Inglaterra con gol de Pipino Cuevas

Que Paraguay y Trinidad&Tobago pasen el grupo

Que Angola le gane a Portugal

Que Irán pase el grupo

Que algún equipo africano (excepto Túnez, que debido a su aceitunada blanquitud es amargo) nos deleite a puro fútbol alegre

Que los equipos africanos negros (y también Trinidad&Tobago) bailen con mucha onda después de cada gol

Que Ghana gane

Que Ronaldinho la rompa a puros malabares y firuletes, excepto si juega contra Argentina

Que Togo le gane a Francia

Que Francia repita la EXCELENTE performance del mundial anterior

Que Túnez le gane a España

Que el gordo Ronaldo no supere el récord de goles mundialistas de Gerd Müller

Que Messi sea figura

Que Carlitos sea goleador

Que Abbondanzieri no ataje

Que en la fiesta inaugural toque Die Toten Hosen

Que les paso algo malo a Araujo y el Colorado Liberman así no relatan ellos los partidos por canal 9

Que la tele no nos sature con imágenes simpáticas de los hinchas brasileños bailando samba, los alemanes tomando birra, los suecos con sombreros vikingos, los mexicanos con sombreros enormes, etcétera

Que el goleador de España sea Mariano Pernía

Que el goleador de México sea Guillermo Franco

Que el goleador de Paraguay sea el Toro Acuña

Que el goleador de Italia sea Mauro Camoranesi

Que el goleador de Francia sea David Trezeguet

Que el goleador de EEUU sea Pablo Mastroeni(sic)

Breve reflexión sobre la transa y el ¨todos para adelante¨

El hombre mediocre argentino (de los cuáles, muchos están en la mass media), suele caminar por mezcladas calles de la ignorancia y el inconformismo, cuando sostiene dos visiones profundamente contradictorias sobre la clase política.

Una de éstas visiones, dice que los políticos (y los partidos políticos también) sólo se la pasan transando, trenzando y armando roscas sólo para beneficio personal. Esto es relativamente cierto pero no es relevante. Por un lado, todos los políticos y partidos deseen obtener alguna cuota de poder o influencia sobre él. Y a veces, para lograr ésta meta, se transa. La otra visión , también de índole quejosa, dice o se pregunta a sí misma por qué los políticos ¨no se dejan de joder y se juntan (fíjese, que no se usan palabras más peyorativas como rosca o transa) y van todos para adelante¨. Frente a esta visión, cabe hacer una pregunta fundamental ¿qué es ese ¨adelante¨ y en que consiste?¿Cómo se llega?. Obviamente no sólo nadie podrá responderlo, por la sencilla razón que hay muchos ¨adelantes¨ y diversas formas de llegar o tomar el camino. Pero lo que importa acá también, es que esta visión carece también de relevancia. Ésta, o sea, la relevancia, o mejor dicho, el fondo de la cuestión, pasa por otro lado. Es decir, pasa por saber el contenido y/o la causa de por qué se transa o por qué tal o cual político (o partido, insisto) se ¨pelea¨ con otro.

Vayamos a algunos ejemplos de la sabia y hermosa historia. 50 años atrás se fusilaba ilegalmente a un grupo de civiles peronistas en los basurales de José León Suárez, hecho inmortalizado por Rodolfo Walsh como ´Operación Masacre´. En la ocasión, los distintos partidos políticos no peronistas apoyaron y justificaron explícitamente y al unísono el hecho. Es decir, se transó, para apoyar un fusilamiento de civiles. Sigamos con más ejemplos, el sindicalismo del ¨Peronismo sin Perón¨, o sea, el de Vandor; transó con Onganía y demás militares para derrocar el gobierno de Illía. Sin duda el gobierno de Onganía resultaría bastante peor que el de Illía. Ahora vayamos a un ejemplo positivo de transa y/o acuerdo. Como está de moda, tomo a Chile; a finales de los ´80, varios partidos políticos (la Democracia Cristiana, el Partido Socialista, el Partido Radical y el Partido por la Democracia) lucharon en conjunto para terminar con la larga dictadura sangrienta de Pinochet y lo consiguieron, y a pesar de cierto excesos neoliberales, los gobiernos democráticos surgido de ese acuerdo de partidos consiguieron mejores estándares de vida para su población. Otro buen ejemplo puede ser el de la China premaoísta; antes de que los japoneses en 1937 invadan la patria confuciana, los comunistas y los nacionalistas se la pasaban a los tiros. Pero ante el peligro de un agresor extranjero, supieron morigerar los violentos ataques recíprocos y así echar de su país a los súbditos de Hirohito.

En conclusión, lo que importa, es saber que el disenso y el consenso en sí no son ni malos ni buenos. Lo bueno, es saber para qué se disiente o consiente y; lo malo, es perderse en las moralidades vagas de la anécdota.